La Fundación CPI trabaja desde 1985 ofreciendo prevención, asistencia y tratamiento a personas en condiciones de vulnerabilidad psicosocial como consecuencia de los efectos discapacitantes de padecimientos psíquicos.

Este Proyecto surgió, en aquel año, con la creación de un Hospital de Día en el barrio de Belgrano, a partir del interés de un equipo interdisciplinario -compuesto por psicólogos,  médicos psiquiatras, terapistas ocupacionales, musicoterapeutas, interesado en ofrecer tratamientos ambulatorios que previnieran las crisis de los asistidos y de este modo rompieran con el circuito de las re-internaciones.

A los pocos años, en 1988,  por necesidad de dar respuesta a los concurrentes del Hospital de Día que requerían una mayor contención y, en algunos casos, alejarse momentáneamente del ámbito familiar, creamos el Hostal. Se trató de un dispositivo de Puertas Abiertas para personas jóvenes o adultas sin riesgo para sí o para otros. Los fundamentos y las modalidades de abordaje de esta experiencia se encuentran desarrolladas en nuestro libro “El Hostal. Una experiencia de tratamientos sin encierro en psicopatologías graves” [Ver en Publicaciones]                                                                                                              

En el año 1993, debido al crecimiento de las demandas de alojamiento, abrimos la Casa de Convivencia Asistida en donde continuamos con el Hospital de Día como oferta psicoterapéutica,  teniendo siempre como meta la inclusión social de las personas que atravesaban una crisis.

Unos años más tarde, a raíz de la Ley de Discapacidad reconvertimos nuestros programas a fin de dar alojamiento y tratamiento, según los lineamientos del Marco Básico de Organización y Funcionamiento de Prestaciones y Establecimientos de Atención a Personas con Discapacidad, siempre con población con problemática psíquica pero ya en el ámbito de la Discapacidad, siendo la Fundación CPI una de las primeras  instituciones habilitadas como Hogar con Centro de Dia.

Durante todos estos años fuimos diseñando dispositivos y propuestas que apuntan a la inclusión al medio socio/comunitario de las personas con discapacidad psicosocial, evitando los procesos de empobrecimiento subjetivo.

En el año 2006 decidimos ampliar el Centro de Día y constituirlo en la única oferta terapéutica. Actualmente se está desarrollando un Centro de Orientación y Prevención para personas con discapacidad que permite detectar rápidamente las necesidades y dar una orientación rápida y adecuada al  consultante y su familia.

Desde el año 2009 adherimos a la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, articulando nuestros programas a la misma y, fundamentalmente, apuntando al acceso a derechos de las personas que integran este colectivo.

Por otro lado, estamos abocados a la formación  de recursos profesionales relativos a los temas de la discapacidad y a nuestra práctica por medio de pasantías y cursos de formación y actualización.